EL ANSIOSO Y LA TIERRA: EL HALCÓN PEREGRINO

No es un ave cualquiera, es un ave muy especial, se trata del animal más rápido del planeta, conocido como "El señor del aire", el halcón peregrino. Mide de 83 a 113 cm de envergadura y de 445 a 750 g de peso (la envergadura y el peso de la hembra es mayor).El halcón peregrino puede alcanzar en descenso suave los 252 kilómetros por hora y en picado la increíble velocidad de 324 kilómetros por hora. Tiene una buena vista de gran agudeza, unas garras bien curvadas y puntiagudas para agarrar fuertemente a su presa, un pico puntiagudo y cortante para dar el golpe de gracia y desgarrar la carne y un plumaje resistente e imbricado para reducir al máximo la resistencia aerodinámica, eso junto con la increíble velocidad de vuelo del el halcón peregrino es considerado una verdadera maquina diseñada para para volar y cazar.
Este halcón es ornitófago, es decir, que se alimenta de otras aves, uno de sus manjares predilectos es la urraca. Se pueden encontrar desde la tundra a las ciudades pasando por las montañas y las costas. Las paradas nupciales concluyen con el apareamiento, ceremonia ritual durante la cual la hembra adopta una postura frecuente de los halcones,se inclina hacia delante,mientras tanto el macho se mantiene sobre su espalda aleteando, con las garras bien cerradas para no herirla . Puede poner de 2 a 6 huevos y su tiempo de incubación es de 29 a 32 días.
Aunque la hembra incuba, su compañero la releva durante el día y la deja en libertad para cazar, el macho se encarga del 25 al 33% de la incubación diurna. Los polluelos al eclosionar, están protegidas por su primer plumón blanco, pero la madre debe darles constante calor durante los tres primeros días. Después de 15 días el primer plumón de las crías es sustituido por otro mas tupido, de modo que la madre solo los calienta durante el 60% del tiempo. A partir de los 17 días, la madre ya deja de darles calor, es cuando las crías empiezan a salirles las plumas.

Para terminar, un chiste.
Este es un gorrión, uno muy fuerte y que no tiene nada que ver con los gorriones del resto del mundo, que un día va volando a 250 kilómetros por hora. Entonces se cruza un motorista y POM, en el casco y el gorrión esta en el suelo inconsciente. El motorista se apura y va a una tienda para comprar una jaulita. Luego vuelve a su casa y pone el gorrión, todavía inconsciente, en la jaula y le pone migas de pan y galletitas y una tacita con agua y se va el motorista a trabajar. El gorrión inconsciente empieza a despertar, empieza a ver los barrotes y dice "joe, me he cargao al motorista".